¿Cuándo nace esta tradición?
La mayoría de los estudiosos la relaciona con celebraciones paganas de época romana, las famosas fiestas saturnales. Lo cierto es que la celebración del carnaval, tal como lo conocemos hoy en día, procede de la Edad Media.
A comienzos de la Edad Media, la Iglesia Católica propuso una etimología de carnaval: del latín vulgar carnem-levare, que significa ‘abandonar la carne’ (lo cual justamente era la prescripción obligatoria para todo el pueblo durante todos los viernes de la Cuaresma). Pero ya en el siglo VII d.C. San Isidoro de Sevilla se quejaba que los fieles, en febrero, celebraban fiestas disfrazados por las calles, incluso vistiéndose del otro sexo, y comiendo y bebiendo sin parar.
¿Cómo se celebraban este tipo de fiestas en la Edad Media?
El auge del carnaval comienza en el siglo XII, con el aumento de la población, sobre todo en las ciudades. Se celebraban de muchas maneras, aunque se mantenían dos elementos comunes: la carne (siendo prohibida en cuaresma, abunda en el carnaval) y del sexo.
Desde el siglo XIV son comunes los desfiles de personajes disfrazados y con máscaras, cantando temas satíricos e irónicos. De la misma manera, es frecuente que se celebre con luchas. Para la nobleza es un tiempo en el que suele celebrar torneos y justas. En Venecia, en la su plaza de San Marcos se encerraban toros y jabalíes y se cazaban con perros. Luego su carne era repartida entre el público. En Roma, por el contrario, eran comunes las carreras con apuestas y en Florencia las justas de caballeros.
¿Qué relación tiene con los disfraces con la religión cristiana?
Los disfraces y las máscaras son una influencia precristiana, de hecho tanto el poder civil como el religioso se mostraron en contra al uso de disfraces y sobre todo de caretas, aunque eran permisivos en estas fechas. La razón del poder civil es lógica, intentaban que no se propagasen los desmanes y que la gente aprovechara el anonimato de la máscara. La iglesia se oponía porque consideraba que al mostrar al ser humano como algo burlón, lascivo, falso, ello era una burla al mismo Dios ya que el hombre estaba hecho a su imagen y semejanza.
En definitiva, en el siglo XII es algo celebrado y extendido por toda Europa. Irá ganando protagonismo hasta que en el XV se conforme casi exactamente a tal como lo conocemos hoy en día, pero no será hasta el siglo XVI, a pesar de algunas prohibiciones, cuando alcance su esplendor, sobre todo en España.
El Carnaval Medieval
El Carnaval Medieval
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