España comparte con otros países europeos el comienzo de la Alta Edad Media. Como una transición inquietante después de la caída final del Imperio Romano y la constitución de los nuevos imperios bárbaros.
Incluso los españoles podemos suponer que nuestro reino germánico correspondiente, el reino visigodo, fue sin duda uno de los más progresistas de los que constituyeron Europa en los siglos VI y VII, principalmente gracias a tres factores:
- Los visigodos fueron el grupo étnico germánico que durante décadas tuvo el mayor contacto con los romanos, tanto en el Imperio Romano en el Este como en el Oeste (Federación).
- La intensa romanización de la Hispania que conquistaron.
- El importante papel en la política de la culta Iglesia hispana.
Evolución de la Edad Media en España
La brillante conquista política y militar de gran parte de la península por parte de un grupo de pueblos de diferentes razas, pero alentada por la misma religión, los musulmanes, supuso un cambio radical en la trayectoria de otros jóvenes reinos europeos.
A partir de ese momento y en las zonas menos dominadas por los recién llegados ocupantes, surgirán uno tras otro distintos intentos de independencia, que terminarán dando nacimiento a condados y reinos cristianos.
El sistema de vida social medieval, ya complejo en el resto de Europa, se enriquece aún más en España por la relación entre la guerra y la paz entre los reinos cristianos entre ellos y el mundo musulmán.
El contacto con el resto de Europa es un objetivo esencial de los jóvenes reinos cristianos para establecerse ante el enemigo árabe.
En este contexto, el Camino de Santiago permitirá a la España cristiana participar en las corrientes culturales, artísticas, religiosas e incluso comerciales y económicas europeas, especialmente durante los siglos XI al XIII.
La Feudalización
Aunque el proceso de Reconquista termina solo después de la conquista de Granada en 1492, la mayor parte de la Península Ibérica y las Islas Baleares en la sexta o séptima década del siglo XIII pertenecen a las coronas portuguesas, castellanas y aragonesas.
Si excluimos el área que ocupa aproximadamente las provincias actuales de Almería, Granada y Málaga, el resto de la mitad sur de la península es conquistada por Aragón en solo treinta años por Fernando III y su hijo Alfonso X por Castilla y León y Jaime I después del rápido declive del poder almohade causado por la derrota en Navas de Tolosa.
Desde el siglo XIII en adelante, hay un proceso de aumento de poder de las clases de bienes. A partir de estos datos, España inicia un proceso de feudalización y aumento del poder señorial.
Fin de la Edad Media en España
España experimenta la crisis medieval del siglo XIV con problemas y catástrofes similares a los de otros estados europeos, y solo en la segunda mitad del siglo XV logró recuperarse en eventos tan importantes como la conquista de Granada y el descubrimiento de América, que marca el final de la Edad Media y el nacimiento de la Edad Moderna.
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